Seguridad en la piscina
¿Sabías que darte un chapuzón en la piscina puede tener un efecto en tu sonrisa? Las investigaciones han demostrado que si estás expuesto a los productos químicos de las piscinas durante largos períodos de tiempo, el cloro puede decolorar tus dientes. Un alto nivel de pH en el agua descompone las proteínas en la saliva, lo que tiñe los dientes de un color marrón.
Si el equilibrio del pH es alto en la piscina, el agua también puede ablandar el esmalte de los dientes, lo que aumenta el riesgo de caries y daños en los dientes. Afortunadamente, puedes prevenir esto con limpiezas dentales regulares y tratamientos con flúor. También es importante usar gafas protectoras al nadar, porque nadar con los ojos cerrados significa que podrías nadar hacia el borde de la piscina, de cara y lastimarte los dientes.
Si la placa dental no se elimina, esta se convertirá en sarro, lo que dificultará su posterior eliminación.
Alimentos y bebidas de verano
Probablemente estés planeando organizar o asistir a muchas fiestas de verano y barbacoas, lo que significa que habrá muchos dulces con azúcar y otros alimentos que pueden dañar tus dientes. Las bebidas de verano, como las bebidas deportivas, la limonada, los refrescos y las bebidas alcohólicas contienen azúcares y ácidos que pueden ablandar el esmalte dental. Aunque es importante cepillarse, estas bebidas suavizan el esmalte y cepillarse mientras el esmalte está suave puede causar más daño, por lo que es mejor esperar al menos una hora antes de cepillarse. Ciertos alimentos, como el maíz en la mazorca y las carnes con hueso, también pueden dañar los dientes, por lo que debe considerar quitar el maíz de la mazorca y la carne del hueso antes de comer, y tener algo de hilo dental a mano para cuando sea necesario no es posible cepillar. Es difícil evitar por completo todos los dulces que vienen con el verano, pero recuerda que la moderación es la clave, así que limita tu consumo de dulces y helados.
Protege tus dientes
Lo primero que muchos niños y adultos quieren hacer cuando llega el verano es salir y andar en bicicleta, patinete…. Desafortunadamente, los traumatismos dentales resultantes de las caídas son una ocurrencia común durante el verano, por lo que es extremadamente importante usar un casco, pero también es importante usar un protector bucal para proteger los dientes. Otra forma común en que las personas terminan con un diente astillado o roto es al usar sus dientes como herramientas. Si bien puede parecer una solución rápida usar los dientes para abrir bolsas, envoltorios o botellas, puede causar un daño significativo a los dientes y las encías. Usa herramientas apropiadas, no tus dientes.
El consejo de verano más importante a tener en cuenta es no alejarse de tus hábitos regulares de higiene bucal. Es importante cepillarse los dientes al menos dos veces al día, especialmente antes de acostarse, usar hilo dental al menos una vez al día y solo beber agua después de cepillarse los dientes antes de acostarse. Antes de irse de vacaciones y ocuparse de los niños y los eventos, asegúrese de visitar a tu dentista para una limpieza y un examen lo antes posible para ayudar a mantener los dientes y las encías saludables durante todo el verano.
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